La creación benéfica, la irrupción del mal, la batalla final

El Bundahishn, la Creación, es una tardía compilación de textos cosmológicos y cronologías, formada a comienzos del siglo X d. C. a partir de fuentes más antiguas.

La historia del universo se extiende a lo largo de 12.000 años. Al principio, el mundo de la luz coexiste con el de la oscuridad de Ahriman, potencia en espíritu (menog).

Ahriman (conocido antes como Angra Mainyu) ve la luz y oye la guerra de 9.000 años propuesta por Ohrmazd entre la luz y las tinieblas, y cae en el abismo.

Al cabo de otros 3.000 años, Ohrmazd (conocido anteriormente como Ahura Mazda) crea el mundo físico (getig), al toro primordial Gosh y al primer ser humano mortal, Gayomard.

Ahriman dispone destruir la creación benéfica. Hace pedazos su camino a través de la bóveda cristalina del cielo, corre a través de las aguas, que se vuelven amargas y salinas, convierte la tierra en desierto y montañas, y lo mancilla todo, mata las plantas, al toro primordial y al primer ser vivo.

El esperma de Gayomard es llevado al sol y el de Gosh a la luna. De la simiente conservada por la luna derivarán nuevas plantas y la vida, renovada por las lluvias de Tir; de la conservada por el sol crecerá -a los 40 años de estar enterrada- un ruibarbo andrógino (rivas), del que surgirá la primera pareja humana, Mashyagh y su compañera Mashyanagh.

Se inicia de esta manera la siguiente era de 3.000 años, llamada periodo de la mezcla del bien y el mal (gumizeshn); en ella, Ahriman vuelve al hombre codicioso, apático, vicioso y enfermo. Al final de este periodo, el nacimiento del profeta Zoroastro da paso al último periodo de 3.000 años.

En esta fase final, cada mil años nace un salvador -Soshans- del esperma de Zoroastro, conservado en el lago Hamun en Seistan, donde fecunda milagrosamente a vírgenes que acuden allí a nadar. Con el nacimiento del tercer salvador, empieza la última batalla, y todos los héroes y monstruos del mito vuelven a la vida para participar en la lucha.

El mal es derrotado finalmente en ordalías de fuego de metal fundido que cubre la tierra; Ahriman es expulsado para siempre a las tinieblas exteriores, y la tierra una vez más se vuelve plana.

Se trata de la gran renovación (Frashokereti o Frashgerd), el fin de la historia.