POSIDÓN EL DIOS DEL MAR

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Posidón, hermano de Zeus, es un dios temible y violento a quien se asocia con múltiples fuerzas elementales de la naturaleza. Gobierna el mar, sobre todo las tempestades y el mal tiempo, y por lo general lleva un tridente, que se asemeja al arpón de pescador. Preside además los terremotos y a menudo se le adjudica el título de Enosigeo (el que agita la Tierra). Podía partir la tierra y las montañas con un golpe de su tridente, como hiciera cuando los Olímpicos se enfrentaron a los Gigantes. En el arte, sus representaciones se asemejan a las de Zeus en cuanto a aspecto y postura, salvo que empuña el tridente en lugar del rayo.

La competición por Atenas es uno de los numerosos mitos en el que Posidón aparece enfrentado a Atenea. En el relato de Odiseo, la diosa apoya al guerrero, pero el dios lo obliga a vagar por los mares. Otro mito cuenta que Posidón adoptó la forma de caballo (un ave según otras versiones) para copular con la Gorgona Medusa en un templo consagrado a Atenea, quien se enfureció tanto ante semejante sacrilegio que transformó en serpientes la cabellera de Medusa. Cuando el héroe Perseo le cortó la cabeza a- Medusa, de su sangre surgieron los frutos de su unión con Posidón, el caballo alado Pegaso y un niño llamado Crisaor, a través del cual Posidón fue antepasado de algunos de los monstruos más famosos de la mitología griega: la Equidna y sus descendientes, Cerbero, la Quimera, la Hidra y la Esfinge, y el león de Nemea.

La turbulenta vida amorosa de Posidón desembocó en otra serie de monstruos y seres y divinidades marinos. Se casó con la ninfa del mar Anfitrite -una Nereida o una Oceánide-, con la que tuvo un hijo, Tritón, hombre de cintura pata arriba y pez de cintura para abajo (una concha representa a Tritón). Pero, al igual que Zeus, Posidón engendró a la mayoría de sus hijos en relaciones extra conyugales. Con Gea tuvo a Anteo, un gigante al que combatió y mató Heracles, y Caribdis, monstruo marino que vomitaba agua tres veces al día y ponía los barcos en peligro. Cuando Posidón empezó a insinuarse a Escila, una hermosa ninfa, Anfitrite, movida por los celos, tiró unas plantas mágicas al agua en la que se bañaba la ninfa, quien se transformó en un monstruo con cabeza canina que, al igual que Caribdis, suponía una amenaza para los navegantes.

Entre los símbolos de Posidón figuran el tridente, el toro (que posiblemente representa su agresividad) y el caballo (el mito cuenta que creó el primer caballo para los atenienses y se le conocía por el nombre ritual de Domador de Caballos). Se le rendía culto en numerosos templos, el mejor conservado de los cuales se alza en un hermoso acantilado que se asoma al mar en Sunio, al sur de Ática.

Además de Posidón, existían otras muchas deidades acuáticas. Gea hizo el Ponto (el Mar) en la primera fase de la creación, y dos Titanes, Océano (Océano era un gran río que, según creían los griegos, rodeaba al mundo) y Teris, crearon a las Oceánides o ninfas del mar. Ponto y Gea engendraron a Nereo, el Viejo del Mar, que poseía el don de la profecía y tuvo con Doris a las Nereidas, cincuenta ninfas del mar entre las que se cuentan Tetis, madre de Aquiles, y Galatea, amada por el cíclope Polifemó.

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