Diotima de Mantinea

Nació:probablemente en Grecia, c. 400 a. C. Falleció:probablemente en Grecia, c. 500 a. C.

Diotima de Mantinea fue una filósofa y sacerdotisa griega que fue maestra de Sócrates y jugó un rol importante en las teorías desarrolladas en El Banquete de Platón.

Sabia mujer con la que Sócrates dialoga acerca del amor en El Banquete de Platón. Fue una sacerdotisa que le reveló sus misterios a Sócrates. Según el ideal griego, las mujeres debían renunciar al ser y a la voluntad. Pero hubo mujeres griegas que no respondieron a este modelo e incursionaron en la política y en la cultura. Tal fue el caso de Diotima, cuyas ideas quedaron plasmadas en el diálogo platónico. Allí se expresa en contra de la separación entre cuerpo y alma y ve en la acción amorosa un camino hacia la divinidad.

Las posiciones respecto de la historicidad del personaje de Diotima están divididas: aquellos que sostienen su existencia, fundamentan su opinión en testimonios de autores antiguos, en el pasaje referido a la sacerdotisa en El Banquete de Platón, quien por otro lado solía introducir en sus diálogos personajes históricos, y en un relieve en bronce que la retrata y se encuentra ubicado en el Museo Nacional de Nápoles. Aquellos que niegan su existencia aducen que las pruebas no son concluyen- tes, y el hecho de que sea una mujer libre y no cortesana no inclina la balanza a favor, pues en la Grecia clásica se prohibía la participación de mujeres en los simposios o gimnasios.

En efecto, la vida de las mujeres de entonces transcurría en un relativo cautiverio, pero Diotima, según la describe Platón, era una mujer excepcional y poseía una gran sabiduría, motivo por el que había sido maestra de Sócrates. Por otro lado, los autores postclásicos se refieren a ella como sabia, filósofa y adivina, dándole la misma importancia que a Safo, a Aspada o a las mujeres de la escuela pitagórica. Según la tradición, Diotima de Mantinea llegó a Atenas a pedido de Pericles en el año 440 a. C., y se presentó con el propósito de librar a la ciudad de la peste. Allí purificó el lugar con diversos rituales y gracias a su Intervención se evitó a lo largo de diez años lu epidemia que finalmente irrumpió durante la guerra del Peloponeso. El joven Sócrates la conoció entonces y el encuentro fue decisivo, pues la sacerdotisa lo inició en los misterios de Eros según la tradición órfica.

Platón revela en El Banquete las teorías de Diotima desarrolladas por Sócrates acerca del amor, y este último dice deberle a la sacerdotisa todo lo que sabe al respecto. Los conocimientos de Diotima tienen origen en la sabiduría antigua basada en la observación de la naturaleza, que conjuga las actividades religiosas con la enseñanza y la medicina. Diotima le propone a Sócrates una genealogía del amor basada en la posibilidad de que éste sea hijo de la Circunstancia y de la Necesidad. Su tesis principal es que en realidad el amor es un anhelo por la inmortalidad.

Este deseo de alcanzar la inmortalidad es lo que conduce a las personas a procrear a fin de generar una continuidad del alma, que no es eterna. En este sentido, si el alma no consigue esta continuidad deja de existir cuando el cuerpo muere, y no alcanza la inmortalidad. Por otro lado, Diotima plantea que existen dos tipos de amor: el físico y el espiritual. Mientras que el amor físico trata de lograr la continuidad del alma y la Inmortalidad a través de la descendencia, el amor espiritual da a luz pensamientos e ideas, que son inmortales. Así, el fin último del amor es ayudar a las personas a ascender hasta alcanzar el conocimiento de lo divino.

La mujer en el banquete

En El Banquete de Platón, Diotima de Mantinea juega un rol fundamental. En esta obra, una serie de personajes discuten acerca del significado del amor, entre los que Sócrates es el orador más destacado. Él refiere que en su juventud aprendió la filosofía del amor de Diotima, quien fue una sacerdotisa o vidente. Las ideas que allí se despliegan dan origen al concepto de amor platónico.