EL AVE TRUENO, REY DE LOS CIELOS

El Espíritu del Trueno se manifiesta en la tierra en forma de Ave Trueno.

El pico o los ojos de este enorme animal, parecido al águila, despide centellas, y al batir las alas produce tronidos. Se le atribuyen temibles poderes creadores y destructores.

Entre los lakotas, el Ave Trueno, Wakinyan, es un dios ayudante, una manifestación del ser supremo, y existe un culto asociado con la experiencia personal del encuentro con él. Según los iroqueses, adopta forma humana como Hiño, el Espíritu del Trueno, guardián del cielo. En la costa noroccidental, el Ave Trueno figura entre los dioses principales del cielo y es tan grande que puede capturar ballenas, su presa favorita.

Los pueblos del oeste creen en la existencia de cuatro aves trueno, cada una de ellas en un cuarto del mundo. En ésta y otras regiones, el Ave Trueno libra perenne combate con los espíritus o serpientes malignos del inframundo, como la pantera subacuática, y sus choques provocan los fenómenos naturales más violentos, como los terremotos, las inundaciones y las tempestades.

Los nativos norteamericanos creen que cualquier cosa tocada por el rayo del i Ave Trueno ejerce un poder espiritual, que debe evitarse o venerarse, según la tradición local.