PROFECÍAS CUMPLIDAS: FUNDACIÓN DE TENOCHTITLÁN

La llegada de los mexicas al valle de México, su permanencia entre los pueblos que ya se habían establecido en los márgenes del lago Texcoco y la eventual fundación de la capital en Tenochtitlán es una serie de acontecimientos en los que el mito se funde con la historia. Aunque se explican como el deseo de Huitzilopochtli, en realidad, los mexicas hallaron el valle de México ya muy poblado, con las mejores tierras ocupadas.

Primero fueron a la ciudad de Colhuacan, cuyo gobernador Achitometl les permitió establecerse cerca a cambio de un tributo y de que lucharan como mercenarios suyos. En esa época aumentó su estatus al casarse con mujeres de Colhuacan. El mismo Achitometl dio en matrimonio a una hija suya a un jefe mexica, que no tardó en sacrificarla al dios Huitzilopochtli.

Perseguidos por el ejército de Achitometl, los mexica se refugiaron en las marismas del lado oeste del lago Texcoco, que pertenecían a Tezozomoc, rey de la ciudad tepaneca de Azcapotzalco. Allí permanecieron como vasallos de los tepanecas hasta 1428 d.C. cuando, bajo su líder Itzcoatl, los mexicas derrotaron a las fuerzas tepanecas.

La victoria histórica de los mexicas con todas sus complejidades fue finalmente reescrita como un triunfo de Huitzilopochtli, cumpliéndose así la profecía de su voluntad divina.