EL HERRERO CELESTIAL

Página índice

Página anterior

En numerosas mitologías africanas, un herrero celestial desempeña un papel crucial en la preparación del nuevo universo para la humanidad. Por lo general, desciende del cielo.

Según los fon de Benin, del África occidental, el hijo mayor de MawuLisa, divinidades creadoras gemelas, era Gu, el herrero celestial. Lo trajo a la tierra Lisa, el varón, en la forma de una espada de hierro ceremonial que empuñaba Lisa.

Después, Gu recibió el encargo de hacer habitable la tierra para los humanos, tarea que nunca ha abandonado. Gu enseñó a la gente a trabajar el hierro y a fabricar herramientas para obtener alimento, cubrir su cuerpo y construir refugios.

Amma, dios creador del pueblo dogón, hizo el primer espíritu herrero con la placenta de un Nommo, pero como este espíritu no tenía fuego, robó un trozo de sol a los gemelos celestiales Nommo y bajó del cielo en un arca celeste. Otros mitos del Sahara cuentan que el primer herrero fabricó una azada con el cráneo de un antílope celestial, Bintu, y después bajó a la tierra para enseñar la agricultura a la raza humana, recién creada.

Página siguiente